Si tu problema son las ojeras:
En primer lugar, asegúrate de utilizar un corrector compacto, que cubra bien, ya que los líquidos no son igual de eficaces para esta tarea. También es importante que el corrector sea de calidad, hidratante para que no se agriete.
Si tu piel es muy grasa, aplica el corrector con un pincel de pelo sintético, para no aportarle más grasa (puedes difuminar bordes con los dedos dando ligeros toques). Si tu piel es normal o seca, puedes permitirte el aplicarlo con los dedos, de esta forma consigues un acabado más natural ya que el calor de las manos, ayuda a fundir el producto.
No olvides aplicar el corrector sólo en la zona oscura de la ojera, llegando a ras de las pestañas inferiores, ya que es una zona que tiende a estar roja o azul dependiendo de la persona.
Asegúrate de usar la cantidad de producto adecuada. Si utilizas demasiado poco, no cubrirá como debe, y si es excesivo, quedará artificial y con un horrible efecto de pegote.
Si no tienes bolsas, utiliza un corrector en un tono más claro que el de tu piel, pero cuidado, porque si es demasiado claro podrías lograr el efecto contrario y hacer que tus ojeras se vean más.
Cuando hayas terminado de maquillar los ojos por completo, puedes utilizar un iluminador para dar un punto de luz en la zona del lagrimal (cuidado con el efecto antifaz).
Nuestro truco: Si aún así no consigues eliminar del todo tus ojeras, hay ciertos colores para sombras que debes evitar. Sobretodo la gama de los fríos como son los azules, morados y grises. Los verdes también potencian las ojeras, por lo que te recomendamos que utilices colores cálidos como la gama de los dorados, cobre, bronce, marrones...
Si tu problema son las bolsas
Ante todo, aplicaremos en primer lugar un contorno de ojos descongestivo. Dan muy buen resultado los que tienen cafeína y los que proporcionan un efecto frío.
Utilizaremos un corrector compacto del mismo tono que tu piel (o muy parecido) y evitaremos utilizar iluminadores en toda esa zona. No obstante, si iluminamos justo bajo la ceja, daremos volumen a esa parte desviando la atención de las bolsas y creando un maquillaje muy favorecedor.
Es importantísimo evitar texturas brillantes, nacaradas o en crema, que al reflejar la luz, proporcionan volumen y resaltan mucho más las bolsas.
Nuestro truco: Si tienes bolsas, te sentará genial el maquillaje con una línea en las pestañas inferiores bien difuminada. Puedes realizarla con lápiz o con sombra, aunque una combinación de ambos hará que el maquillaje sea mucho más duradero.